Paola y Carlos se casaron en la iglesia de Capitanía, que se encuentra en el centro de Valencia. Los padres de la novia ya se casaron allí, y fue a Paola le hacía especial ilusión. Para su gran día no dudó en viajar a Madrid y presentarse antes su diseñadora favorita, Sole Alonso. Ella captó su idea a la perfección. Combinó su vestido con tocado y ramo de Atelier de la flor así como zapatos de Just Ene Shoes. En cuanto a las joyas, llevó unos pendientes minimalistas de su madre, su «algo prestado». Lets make up se encargó de todo su estilismo.

Carlos, el novio, escogió la firma Hackett para su traje y su corbata. Los niños de arras llevaron conjuntos de la marca Tizzas y a la niña se le añadió una corona de flores obra de Atelier de la Flor.

En cuanto a la decoración floral, Flores Feliu se ocupó de la iglesia y Atelier de la Flor se hizo cargo de la masía, Huerto San Vicente. Los novios tenían claro que quería una celebración al aire libre, con velas y luces tenues, y así se hizo. Cristina, directora del espacio Huerto San Vicente, puso todo su empeño y cariño para que todo saliese a la perfección. Tanto el cóctel como la cena corrieron a cargo de Gourmet Catering y la música del evento la puso Audioprobe; a excepción del cóctel que fue ambientado por el grupo rumbero La Polvaera.

La pareja entró en la cena con We found love de Rihanna y Calvin Harris; iluminados por cientos de barras de colores agitadas por los invitados. El ramo de la novia acabó en las manos de su hermana al son de Color Esperanza De Diego Torres. Por último, la pareja abrió el baile con  Forever Young de Danny Darko y Julien Kelland bajo un manto de confetti.

Todo el reportaje fotográfico es obra de Lázaro Aznar.