29 Oct La boda de Andrea y Nacho en el Palacio de Meres
«Somos Andrea y Nacho, llevamos 14 años juntos, y aunque parecía imposible y todo iba en contra, conseguimos casarnos en este año tan complicado. Nuestra fecha original era el 6 de Junio, pero debido a la pandemia tuvimos que posponerla al 18 de Septiembre. Yo soy médico en Madrid y Nacho abogado, y no pudo ser un día más especial y feliz para nosotros después de todo lo que han sido estos meses (sobre todo para mí en el Hospital).»
Andrea y Nacho son de esas valientes parejas que dijeron SÍ QUIERO en este año 2020. Decidieron casarse en la Iglesia de Santa María, debido al valor sentimental que tenía este lugar. Ahí se casaron los padres de la novia hace treinta años. Para su gran día, Andrea escogió a la diseñadora Cristina Valenzuela; combinó su vestido con unas sandalias de Flor de Asoka y su ramo fue obra de El Invernadero. De su estilismo, tanto maquillaje como peluquería, se encargó Gonzalo de Corta Cabezas, en Madrid. El novio llevó chaqué de Félix Ramiro, gemelos Mont Blanc y zapatos Lottuse. La madrina lució conjunto de Carmen Halffter y la madre de la novia llevaba un vestido de Lagasca 67.
La novia hizo su entrada acompañada por cinco niños de arras, vestidos con conjuntos de Labubé. Entró en la iglesia de la mano de su padre, al son de las voces del coro infantil de la compañía La Federica. Tras la ceremonia, novios e invitados se dirigieron al Palacio de Meres; tanto allí como en la iglesia, la decoración floral corrió a cargo de El Invernadero. Durante el cóctel, sonó la música en directo de Día D Jazz Eventos.
Los invitados recibieron una bolsita con Marañuelas y Luanquinas (bollos típicos de Luanco). El baile lo abrieron la novia y el padrino al son de “All of me” de John Legend. Entonces, su familia les sorprendió con una canción hecha para los novios y contando su historia, obra de Canciona.
El reportaje fotográfico fue obra de Cristina Cañibano y el vídeo de Héctor Torra.
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